La capital de Escocia conserva inalterable su espíritu de ciudad medieval. Sus calles guardan muchísimas historias de las que los cuentacuentos se encargan de que no caigan en el olvido. Ciudad de poetas, escritores, filósofos, genios, brujas y asesinos. En verdad pocas ciudades guardarán tanta historia como ésta.

¿Dónde dormir?

• Alojamiento: High Street Hostel
• Precio: a partir de 20 euros la noche habitación compartida.
• Valoración: el hostel no está nada mal, un edificio reformado con más de cuatro siglos. Lo cierto es que no puede estar mejor situado.

Un casco histórico con mucho que contar

El casco histórico (old town) de Edimburgo está declarado patrimonio mundial por la UNESCO. En sus calles se mezcla ese agitado pasado  de periodos gloriosos y episodios sádicos y sangrientos.

Antiguamente la ciudad fue un laboratorio social, ya que al estar limitada por las murallas la única expansión posible era que los edificios crecieran a lo alto. La calle era una enorme cloaca, y las clases sociales no estaban separadas por barrios.

Por ese motivo buscaron otra forma de clasificación: las clases sociales más bajas vivían en los bajos de los edificios mientras que las familias más adineradas vivían en lo alto. ¿El motivo? porque por aquel entonces la gente tiraba todos los excrementos a la calle por la ventana, con lo que cuanto más abajo se vivía… bueno, os lo podéis imaginar.

La ciudad hoy en día

Ahora el casco histórico de la ciudad es uno de los mejores conservados de Europa. Cada año, durante todo el mes de Agosto se celebra el festival de Edimburgo. Ese mes es un verdadero frenesí cultural que atrae a más de un millón de visitantes de todas las partes del globo.

Pero en realidad no es un solo festival, sino varios: aquí puedes disfrutar de teatro, música, cine, literatura, conciertos de jazz, etcétera. Y es que es una de las capitales de las letras europeas. De hecho aquí nacieron o vivieron el filósofo David Hume, Sir Walter Scott (Rob Roy, Ivanhoe), Robert Louis Stevenson (El extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde, La isla del tesoro…), o más recientemente figuras de culto como la archiconocida J.K. Rowling con su Harry Potter, o Irvin Welsh, con la bestial Trainspotting.

Su marcado carácter literario, y su aspecto medieval es un polvorín donde se acumulan infinidad de historias tétricas. Los fantasmas y la quema de brujas, los asesinos en serie y espíritus forman parte de su ADN. Pero eso ya lo contaremos al final.

El castillo de Edimburgo

En la colina de Castle Hill se alza este castillo que ofrece unas majestuosas vistas de la ciudad. La ubicación es perfecta, con sólo un punto para poder acceder a la fortaleza. Por cierto, la colina es un extinto volcán.

Aproximadamente 1 millón de personas lo visitan cada año, así que no será la única persona en visitarlo. Además el Castillo es enorme, así que si te decides a hacer una visita (cuesta 16,50£), necesitarás varias horas.

Entre lo más destacado que podrás ver dentro está la Capilla de Santa Margarita, unas joyas llamadas «Los Honores de Escocia» y el «Mons Meg«, un enorme cañón medieval.

La catedral – St. Giles y la Royal mile

Curiosamente, la catedral de Edimburgo no ejerce como tal, ya que no tiene ese título. De hecho se la conoce como High Kirk of Edinburgh (Gran Iglesia de Edimburgo).

El edificio actual data del siglo XV, y se encuentra en plena Royal mile, la calle más famosa de Edimburgo. Esta calle está determinada en sus extremos por el Castillo de Edimburgo y el Palacio de Holyroodhouse.

Esta calle es una de las zonas más concurridas de la ciudad. Aunque tiene una clara influencia del turismo, los lugareños también se pasean por aquí. En los alrededores podrás disfrutar de varios restaurantes y pubs, donde tomar una pinta.

Como curiosidad decir que la longitud total de la calle es de 1.814,2 metros, lo cual hace una medida muy particular, la milla escocesa.

The Huh, la reconversión de la iglesia

La sede del Festival Internacional de Edimburgo no puede estar en mejor sitio. Una enorme aguja neogótica es testigo de que esta antigua iglesia en la Royal Mile sigue teniendo su importancia. Tiene una cafetería – bar en la que te puedes tomar algo ¿algo mejor que tomarte una pinta dentro de una iglesia?

Monumento a Walter Scott

Aunque parezca la torre de Mordor, realmente no lo es. Se trata del monumento a un escritor más alto del mundo. De estilo neogótico, impresiona, aunque sea un tanto lúgubre. Se puede subir arriba del todo.

Como curiosidad decir que la longitud total de la calle es de 1.814,2 metros, lo cual hace una medida muy particular, la milla escocesa.

¿El colegio de Harry Potter?

El colegio George Heriot’s school ha inspirado al colegio de Howarts en las novelas de Harry Potter. En su momento fue fundado para niños indigentes, y ahora la matrícula es para familias de élite.

Cementerio de Greyfriars

Una de las visitas típicas en la ciudad, es el cementerio de Greyfriars. Este «bonito» cementerio parece más un pequeño parque que otra cosa. Se encuentra muy cerca del colegio George Heriot.

Es bastante común ver a gente paseando por las inmediaciones. De hecho hasta tiene un pub. Eso sí, un parque con muchas historias, alguna muy macabra, y otras más románticas. Entre estas últimas está la del perro Bobby, el cual estuvo 14 años frente a la tumba de su fallecido amo.

Un mirador especial, la silla de Arturo

Probablemente el mejor mirador de la ciudad sea Arthur’s seat. Con sus modestos 251 metros de altura este antiguo volcán nos proporciona unas vistas inmejorables. El paseo hasta aquí merece la pena, y si hace un buen día, es habitual ver a la gente paseando o haciendo deporte por los alrededores.

Edimburgo, leyendas e historias

Hay miles y miles de historias que merecen la pena escucharse. Por ejemplo la del verdadero Dr. Jekyl y Mr. Hyde, el perro Bobby, o tantas y tantas historias que os pueden contar

Una gran idea es la que han desarrollado el grupo Sandeman con sus tour gratis , en el que realizan tours por varias ciudades de Europa de forma totalmente gratis. Si después del tour te has quedado satisfecho puedes pagar al guía lo que consideres oportuno (depende de la ciudad yo doy entre 5 y 10 euros). Bueno, creo que es el momento de contar algunas historias de las historias que nos contaron.

Crímenes y castigos

La justicia de la ciudad era extremadamente cruel. Un pobre mendigo que hubiera robado un pan para comer podía acabar colgado en la soga. Pero este no era ni mucho menos el único castigo. Había mucha imaginación para el dolor: latigazos, marcados con hierros, cepo, amputaciones, ahogamiento, etcétera.

El espectáculo infligido a los delincuentes formaba parte de la vida cotidiana de la ciudad. Inclusive las mujeres que tenían hijos sin pareja estaban muy mal vistas.

Mary, la medio ahorcada

Una mujer que se quedó embarazada ocultó su embarazo hasta el octavo mes. En ese momento dio a luz un hijo muerto. Por miedo a que la castigaran fue al río a deshacerse de su cadáver, pero en el último momento no tuvo el valor de desembarazarse de su hijo.

Sin embargo fue descubierta por un ciudadano que la denunció, así que el castigo fue la horca. Pero aquí no acaba la historia. Cuando después de ahorcarla la llevaban al cementerio notaron que algo se movía dentro del ataúd, lo abrieron y allí estaba la mujer ¡aún viva!.

Entonces el juez dijo: «Debemos colgarla de nuevo«. En este punto los ciudadanos lo impidieron argumentando que había sido dios quien la había salvado, y ante el fervor popular el juez rectificó y le perdonó la vida. Ahora un bar recuerda esta historia con el nombre de la mujer, Mary «la medio ahorcada».

La caza de brujas

En Escocia la matanza de brujas fue especialmente atroz ya que causó unas 4.000 víctimas (300 sólo en Edimburgo). Tras ser sometidas a las torturas más duras, las mujeres acusadas de brujería eran arrojadas a una hoguera a los pies de la muralla.

Para localizar a las supuestas brujas, la prostitución era una señal brujería, así como el tener un tercer pezón. Algunas sospechosas eran sometidas a una prueba infalible: la bruja era arrojada al lago con los dedos gordos de los pies atados a los pulgares. Si no se hundían eran culpables porque el demonio les estaba ayudando, si se hundían, inocentes. Genial.

Unas escaleras muy jodidas

Si te invitaban a una casa y eras bienvenido, los anfitriones te informaban de que había un escalón más pequeño que los demás, así no sufrías un percance. Si eras un ladrón o no lo sabías te podías mata, cosa que también pasaba con los borrachos al volver a sus propias casas. Ahora están prohibidas, con lo buena idea que era…

¿Dónde tomar algo por la noche?

Un lugar muy recomendable si os gustan los locales en los que predomina el underground y la guitarra eléctrica en todas sus variantes es «The Hive«, en el centro de la ciudad. Varias salas con varios ambientes y música de ACDC, Nirvana, Guns and Roses, The Killers, etcétera. Actualización en 2023: parece que las reseñas del local han bajado mucho, así que no es un local que pueda recomendar.

Para terminar…

Lo cierto es que esta ciudad es muy interesante. Quizás la gente no pare mucho en ella en su viaje por Escocia, pero merece la pena dedicarle un par de días. Os dejo con unas pocas fotos más.