Londres ¿la ex capital de Europa?

Londres ¿la ex capital de Europa?

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Supongo que se podrían decir muchos tópicos acerca de esta ciudad. Que si ciudad de contrastes, que si elegante y señorial, que si tiene un clasicismo exacerbado, etcétera.

Curiosamente también se podría decir que es una ciudad moderna. Acostumbrada a una fortísima inmigración o a movimientos radicales como el punk de los años 80. Y es que en una ciudad de ocho millones de almas cabe de todo.

¿Cómo visitar la ciudad? Los tours «gratuitos»

En primer lugar, como he hecho infinidad de veces, aconsejaría un primer vistazo a la ciudad con el grupo Sandemans. Son tours «gratuitos» de unas tres horas, en los que pagas lo que consideres oportuno.

El pago depende de la ciudad, pero yo creo que entre 5-10 libras por persona entra dentro de lo normal. Merece mucho la pena, así tienes una visión general de la ciudad para luego detenerte en lo que consideres más importante.

El Palacio de Westminster y el Big Ben

Este palacio alberga la cámara de los lores y la cámara de los comunes. Es comúnmente llamado The Parliament («El Parlamento»), y se encuentra al lado del Río Támesis.

En uno de sus extremos se encuentra uno de los iconos del país: El Big Ben. De estilo neogótico, deja claro la magnitud que tuvo el extinto imperio británico. En 1858 se finalizaron las obras, y desde ese momento, con sus 96 metros de altura, es una de las torres más altas del mundo.

Entre sus curiosidades, cabe destacar que contiene el reloj de cuatro caras más grande del mundo. O que el origen de su nombre no es claro, pero que puede que sea por Sir Benjamin Hall, un comisario de obras Públicas.

The Tower Bridge

Declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco, en mi opinión es el símbolo más espectacular de la ciudad. En el siglo XIX Londres creció muchísimo, por lo que el fue necesaria la construcción de un nuevo puente. En 1894 se finalizó este majestuoso puente levadizo, que funcionaba por máquinas a vapor. Actualmente es posible visitar su exposición.

La Torre de Londres

Situado en medio de la ciudad se encuentra uno de los castillos más famosos del mundo. Esta enorme fortificación durante más de 900 años ha dominado la ciudad, y declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO. La exposición medieval que hay en su interior es impresionante. Realmente muy recomendable.

La Catedral de San Pablo, aquí todo es grande

O en inglés, Saint Paul’s Cathedral. Que esto estamos en la capital del mayor imperio de todos los tiempos es evidente. No por nada esta catedral es la segunda más grande del mundo, tras la Basílica de San Pedro en el Vaticano. Aunque en este emplazamiento hubo varias iglesias y catedrales, la actual data de 1710.

Probablemente lo más atractivo (y duro), sean las vistas desde arriba tras subir 400 escalones. La verdad es que la iglesia es verdaderamente majestuosa, aunque es un poco rara. En primer lugar no entiendo muy bien que haya que pagar para entrar en una iglesia. Pero es que en la parte inferior, donde estaban las catacumbas haya una tienda con souvenirs, una cafetería y un restaurante. Por la gracia de Dios.

Palacio de Buckingham

Residencia oficial de la realeza británica. Aquí se efectúan a diario en verano y en determinados días en invierno el archifamoso cambio de guardia. Si tenéis intención de ver el espectáculo armaros de valor para ir pronto a pillar un buen sitio porque la cantidad de gente que se aglomera es brutal.

Por lo demás, el espectáculo es curioso, guardias tocando «Living la vida loca» o el hit del momento. Pensándolo quizás sí que sea su graciosa majestad.

Para los que les gusten los cotilleos, comentar que el palacio de Buckinham ha tenido a lo largo de su historia graves fallos de seguridad. Entre ellos el del periodista Michael Flagan del Daily Mirror que estuvo trabajando como empleado durante dos semanas en el palacio, sacando fotos del tupperware de cereales de la reina, de los armarios de sus nietos, etc.

Pero el fallo más gracioso es el que sucedió en 1981. Tres mochileros de origen alemán acamparon una noche en el palacio pensando que era el parque de Hyde Park. Aún no sé qué es más increíble, la falta de seguridad o las pocas luces de los turistas.

Horse guard parade

Sede de la guardia montada, una plaza con unas vistas espectaculares ya que también se ve al fondo el London eye.

London eye, empieza la modernidad

Un nombre bonito y romántico para la noria de toda la vida. Aunque no hay que quitarle la espectacularidad de su diseño, y que ha dado al Támesis otro punto más de referencia. Eso sí, los precios son prohibitivos, 33 libras por media hora. Si queréis buenas vistas de la ciudad por bastante menos dinero podéis visitar la cúpula de la catedral de St. Paul.

The city y otras modernidades

Se conoce como «The city» al distrito financiero de la ciudad. Está claro que esta zona deja claro el poderío económico del país, con modernos rascacielos que rompen con la estética del resto de la ciudad.

Sin embargo no es el único ejemplo de modernidad. Otro ejemplo claro es el ayuntamiento o City Hall, entre el Puente de Londres y Tower Bridge . Diseñado por Norman Foster, es el nuevo ayuntamiento de la ciudad. Su diseño no deja indiferente a nadie.

Otra gran estructura en el centro de la ciudad es The London Millennium. Lo más curioso de este proyecto es que a los dos días de su inauguración se tuvo que cerrar. ¿El motivo? el balanceo que sufría por la gran afluencia de público en sus primeros días.

Las plazas en mayúsculas: Trafalgar Square y Picadilly Circus

Probablemente las dos plazas más famosas de la ciudad sean Trafalgar Square y Picadilly Circus. En Trafalgar Square se encuentra la National Gallery, uno de los museos de arte más importantes del mundo. En el caso de Picadilly Circus, por sus carteles de Neón y la enorme oferta de ocio.

La abadía de Westminster

Probablemente el templo más famoso de la ciudad. Acabada en 1065, fue consagrada para dar cobijo a los monjes benedictinos. Como los ingleses son muy amantes de sus tradiciones, todos los reyes son coronados aquí. Y no es una tradición nueva, tiene casi un milenio. Desde Guillermo el Conquistador en 1066 son muchos reyes.

El río Támesis y los parques

Desde tiempos inmemoriales, el Río Támesis ha sido siempre protagonista en la capital del imperio. Dos mil años de vida desde que los romanos la llamaron Londinium.

Pero además de esta autopista fluvial, la ciudad tiene otros sitios atractivos naturales. Entre ellos está Hyde Park, el parque por excelencia de Londres. Es enorme y realmente merece la pena si se quiere descansar de la agitación de la gran urbe.

Los barrios

Hablar en una sola entrada de los barrios que tiene la ciudad sería una aberración. Desde el multicultural Soho y su Chinatown, al «cool» Camden Town, la oferta es enorme. Desde el entretenimiento ofertado por Covent Garden, al famoso Notting Hill.

¿Cómo viajar?

El transporte público en la ciudad es muy caro. Con las enormes distancias de la ciudad y el precio del billete simple, comprar un bono es lo más económico. El bono más económico es la Oyster card, que es es la misma tarjeta que utilizan los londinenses.

En función de la hora punta, fin de semana, etc los viajes son más caros o no, pero hay un máximo de gasto al día, después no gastas más aunque vuelvas a utilizar el metro. Además la tarjeta también sirve para el autobús.

Curiosidades de la ciudad

Los pubs

No se puede entender Reino Unido sin sus pubs. Cervezas, Football y Rugby van de la mano en estos locales. Una visita a uno de estos bares y tomarse unas buenas cervezas es, simplemente, IMPRESCINDIBLE. La medida estándar de cerveza es la pinta, algo más de medio litro por unas tres libras y media. Aquí la cerveza Cruzcampo está prohibida por ley.

El metro, The Tube

Llamado «The tube«, si lo tuyo es el barranquismo, la espeleología o algo parecido este es tu sitio, te sientes como en una caja de sardinas. Cuidado con las líneas cerradas y con los horarios de cierre.

Look left, look right, look left, look right

…y pasar. Como los coches conducen en sentido contrario no estamos nada acostumbrados a mirar a la izquierda antes de cruzar. Hasta el punto que te lo recuerdan en el suelo.

Y por último…

Que disfrutes de esta magnífica ciudad de mil caras, historias y lugares. Os dejo con unas cuántas fotos.

davidsantes

Érase una vez un tipo normal con una gran pasión, viajar. Esta pasión a su vez alimentaba su curiosidad, y como tenía muy mala memoria lo dejaba todo plasmado en otra aficción, la escritura. Este tipo normal también era un loco de la fotografía, con lo que al cerrar el círculo lo transformó en un blog.

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Esta entrada tiene 4 comentarios

  1. Anónimo

    Muy lindas las fotos y los consejos. Saludos.

  2. David

    ¡Muchas gracias! me agrada que te guste el post y las fotografías

  3. rojopicanton

    ya nos avisarás cuando te nos largues a los Edimburgos, más que nada para ir cerrando billete! 😉

  4. David

    Calma calma, aún queda tiempo, por ahora el viaje de Agosto en el festival. Pero sí, ya sabes que serás de los primeros en saberlo rojopicantón. Agur!