Llegar en bus a La Paz impresiona. El hecho de que la capital de Bolivia está enclavada en un profundo cañón y rodeada por montañas de gran altitud, no deja indiferente a nadie. Además la ciudad parece una inmensa olla, y la forma de entrar en ella es de arriba a abajo, teniendo una panorámica de toda la ciudad.
Las montañas de los alrededores llegan a los 6.465 metros de altura, como en el caso del monte Illimanique, que domina toda la ciudad. La ciudad es bastante fría, normal teniendo en cuenta que la parte más baja se encuentra a 3.600 metros. Sin embargo, por la mañana el sol puede ser bastante potente, y hay que tener mucho cuidado con él.
¿Dónde alojarse?
- Alojamiento: Central Guesthouse Hostel
- Precio: unos 5 euros
- Apuntes: el hospedaje lo lleva un abuelo muy simpático, yo me sentí como en casa. En el salón por la noche me ponía una película y a dormir en el sofá. Desayuno incluido.
Plaza Pedro de Murillo
La plaza principal, aquí se encuentra tanto la catedral como el palacio presidencial. Por segunda vez en este viaje por Sudamérica, he visto a Maradona porque jugaba un partido aquí en favor de que se pudieran jugar partidos de fútbol de la FIFA en altura. También debía estar en la plaza Evo Morales (en chándal), aunque no le vi.
Zona centro
La zona más comercial. Para nosotros los precios son increíblemente accesibles: aquí puedes ir al cine y ver una doble sesión con películas de estreno por algo más 1 euro. O comer un menú del día por 1 euro (o menos). Sin embargo, el salario medio en La Paz es bajo, y hace que alquilar un piso en el centro de la ciudad sea muy difícil para los ciudadanos de a pie.
Los monumentos de la ciudad
La Paz no tiene grandes monumentos que llamen la atención. La Catedral Metropolitana Nuestra Señora de La Paz y la iglesia de San Francisco son dos de los edificios más emblemáticos.
Altura de miras
Pero como ya he comentado anteriormente, si por algo llama la atención la capital es por su altura y su forma de gran olla, con desordenadas casas bajando las laderas. Muchos turistas llegan a la ciudad, se bajan del autobús o avión y quieren empezar a hacer cosas. ¡¡¡Calma!!!, la altitud y las primeras cuestas se encargan de mostrarnos que esto no es posible, y que es necesario un periodo de adaptación. Las hojas de coca ayudan a remitir esta sensación.
Otras personas sufren mal de altura o soroche. Da igual si eres un experimentado deportista, el mal de altura te puede afectar igualmente. En este caso, si los dolores persisten al cabo de un tiempo poco se puede hacer, más que bajar del altiplano.
Un enorme mercado
Otra de las características de la ciudad, La Paz es un enorme mercado al aire libre. Calles, callejones y callejuelas están abarrotadas de mercados, en donde puedes comprar desde unos «pantalones LEVI’s», una navaja suiza, un transistor o un feto de llama.
Sí, lo he escrito bien, un feto de llama. En Bolivia la religión católica absorbió mitos y creencias de las religiones andinas. Por ejemplo la pachamama (madre tierra) muchas veces se relaciona con la virgen María. Tengo entendido que los fetos de llama son para bendecir las casas nuevas.
Como curiosidad tras recorrer los interminables mercados no sabes si estás en Bolivia o en Israel, carteles en hebreo, miles de israelís por la calle, menús especiales para ellos… y es que ésta es la ciudad perfecta para el comercio, y no se me ocurre nadie mejor que ellos para regatear.
La Paz es una ciudad muy interesante!!!