Destino Godafoss, la cascada de los dioses
Un día tranquilo, con la visita al parque nacional de Jökulsárgljúfur, alrededores del lago Mývatn, y la cascada de Godafoss.
Cada vez nos queda menos para terminar el viaje. Esta vez nuestro plan era hacer alguna excursión en las curiosas formaciones rocosas de Hljoðaklettar, ir al lago Mývatn y ver la cascada de Godafoss, la última del recorrido.

Hljoðaklettar, las rocas del eco
Hljoðaklettar (pronunciado Khlee – oth – ak- lett -ar) podría traducirse libremente como las «rocas de eco», por el sonido que es reflectado de sus muros. Estás formaciones de basalto a lo largo del cañón de Jökulsá son realmente curiosas.
Se pueden hacer infinidad de recorridos, los que hicimos no nos llevaron más de 2-3 horas en total, y pudimos ver el cañón, así como curiosas cuevas y formaciones de basalto.









El lago Mývatn, ¿el reino de las moscas?
Una vez que almorzamos en la cueva, nos pusimos de nuevo en la carretera. Nuestro siguiente destino: el lago Mývatn (el lago de las moscas enanas). Y lo cierto es que había miles de moscas que eran realmente muy pesadas, así que, muy a nuestro pesar, nos fuimos de ahí bien rápido.

En la carretera vimos un punto de interés que no teníamos planeado: Hverir. Había mucha gente, y nos pareció buena idea ver qué era.

Hverir ¿El reino del huevo podrido?
De las moscas pasamos al huevo podrido. Hverir es la mayor solfatara de Islandia, teniendo en cuenta que se conoce como solfatara al conjunto de pozos de barro hirviendo, depósitos de azufre y fisuras por donde emanan vapores de agua con sulfuros de hidrógeno, a veces a gran presión. Es decir, huevo podrido a raudales.
Eso sí, el espectáculo era muy curioso. Buen sitio para parar 10-20 minutos, pero no mucho más.



Godafoss, la cascada de los Dioses
El último punto turístico del día fue la cascada de Godafoss (la cascada de los dioses), cerca de Akureyri. Lo curioso es que, tras haber visto muchísimas cascadas esta aún nos sorprendió por su forma de herradura y color del agua. El debate del momento fue… ¿si te tiras al agua sobrevivirías? como somos muy machos y tontos, pensamos que sí.
La leyenda cuenta que el máximo legislador de la isla, Thorgeir, decidió que era el momento de dejar a un lado a los dioses paganos. De esta manera aceptó la cristiandad, así que recogió todas las imágenes de Thor, Odín y compañía y las arrojó a sus frías aguas. De ahí el nombre de la cascada.





