Quizás la Costanera norte no sea la zona más turística. Quizás no aporte glamour o historia como otras zonas. Quizás no tenga mucho atractivo. Todo esto puede tener su lógica. Buenos Aires es una ciudad que le dio la espalda a la entrada del mar, bien lo saben barrios como la Boca en donde la desembocadura del río acumula suciedad de una forma insultante.
Pero en medio de la nada, separado por la Avenida Leopoldo Lugones del resto de Palermo y sufriendo el ruido del aeropuerto Jorge Newbery, se encuentra un este pintoresco edificio de 1903 declarado Monumento Histórico Nacional y su larguísimo muelle de 500 metros. Parece un paraje sacado de Maine o Canadá, pero no, estamos en Sudamérica, concretamente en un terreno olvidado en Capital Federal. Se trata del club de pescadores. Las fotos hablan por sí mismas ¿no?
Es precioso.
Cada día me estás dando más envidia.
Espero a Iguazú.
Por Perú ya he estado 2 veces y me gustaría volver, pero de momento me recrearé con tus post.
Ondo pasa.
Muy buenas Bernardo
Yo estuve hace 3 años, Iguazú es una auténtica pasada, me gustó tanto que la prox semana me haré 34 horas en bus para verlo de nuevo, al estar aquí por tarabajo el tiempo no sobra, pero la plata tampoco jaja.
Ya pondré fotos, que eso sí que es espectacular.
Agur!