Que Andalucía tiene pueblos espectaculares, creo que nadie lo puede poner en duda. Su pintoresca estampa está adornada con la antigua costumbre de los habitantes de encalar las fachadas de las casas, aportando esa estampa blanca tan característica.
Al blanco impoluto de las casas se suma la historia y monumentos, las flores de vivos colores, el marrón de la montaña, y el cielo azul. Andalucía tiene muchos pueblos con este encanto, por ejemplo, en Granada. Pero esta entrada está dedicada a los pueblos existentes en la provincia de Cádiz, que tienen un sabor muy especial.
Vejer de la Frontera, en la champions league de los pueblos de España
Comenzamos con un plato fuerte. Muy cerca de Conil de La Frontera, se encuentra este hermoso pueblo, con uno de los conjunto histórico-artísticos más importantes de Andalucía. La influencia de 500 años de dominio árabe impregnan el ambiente, y se nota en sus estrechas callejuelas.
Las vistas de la Calle Corredera
Un buen acercamiento a Vejer de La Frontera, es iniciar la visita por la Calle de La Corredera.
Desde este punto, los 200 metros sobre el nivel del mar permite unas vistas de los alrededores privilegiadas. Posteriormente, podemos adentrarnos en las callejuelas de Vejer por el Arco de Sancho IV.
La Plaza de España
Para el humilde tamaño de Vejer (12.000 habitantes), el centro tiene unos cuántos sitios muy interesantes. La animada Plaza de España es una visita obligada, con una fuente con azulejos al estilo sevillano.
Aquí también podrás ver una de las estatuas de la cobijada vejeriega que hay en el pueblo. Se trata de un traje femenino comúnmente confundido con el burka, pero que su origen está alejado de las tradiciones árabes, sino que tiene más que ver con las castellanas.
Este traje sólo dejaba ver un ojo de las mujeres, y hoy en día forma parte del folclore local. Se prohibió su uso en 1936, en época de la República española. Podéis visitar este artículo para saber más sobre la cobijada .
Iglesia del Divino Salvador
En el punto más alto del pueblo se encuentra esta vieja mezquita reconvertida en iglesia. Poco queda de aquella a simple vista, aunque si se observa mejor, se podrá ver que entre tanto arte mudéjar y gótico tardío, la torre era el antiguo alminar.
El Castillo y las murallas de Vejer
Vejer era una plaza fortificada, con murallas que aún se pueden apreciar y un pequeño Castillo de los siglos X y XI, durante el reinado de Abderraman I.
Hoy en día se puede visitar su interior de manera gratuita. Aunque no contiene nada especial, al ser un castillo y debido a su antigua funcionalidad, las vistas del entorno son envidiables.
Antiguo Convento de Nuestra Señora de la Concepción
Inaugurado en 1552, este convento concepcionista fue clausurado en 1835 por la ley de desamortización. Hoy en día está gestionado por la administración municipal, proporcionando a la población un centro cultural y sala de exposiciones.
El arco de las monjas
Muy cerca del Castillo y del antiguo convento, probablemente esté el rincón más bonito y fotogénico de Vejer. Se trata de un callejón, engalanado con varios arcos, y con las casas blancas tan características como telón de fondo. Un pequeño rincón para un gran momento.
Esta zona era la de la antigua judería, y siguiendo el callejón, hay un par de bares con terrazas muy interesantes. Si tienes tiempo, tómate un café en la terraza, un imprescindible.
Piérdete por las calles de Vejer
Como cualquier otro pueblo blanco, lo suyo es que camines por esta bonita población, y descubras sus bellos rincones.
El Palmar de Vejer
Aunque Vejer se encuentra en el interior. Parte del municipio acaba en el mar. De hecho, El Palmar de Vejer, que mucha gente piensa que pertenece a Conil, realmente pertenece a Vejer de La Frontera. Si quieres disfrutar de una playas y atardeceres de infarto, estás en el sitio correcto.
Come como un califa
Hay un sitio muy especial dentro de Vejer de La Frontera que es altamente recomendable. Se trata del Jardín del Califa (Plaza de España, 16), un espectacular restaurante de estilo árabe, construido sobre un granero del siglo XVI. El marco es incomparable, y los precios son muy contenidos.
Setenil de las bodegas, donde la roca es la protagonista
Dentro de la ruta de los Pueblos Blancos, Setenil de las Bodegas es especial. Y no sólo por sus casas blancas, sino porque las cuevas de esta zona han estado habitadas desde hace más de 5.000 años. Y aún siguen estándolo.
Hoy en día el pueblo está considerado Conjunto Histórico – Artístico, debido a un original entramado de calles, cuevas y entorno natural.
Sus sinuosas calles siguen el trazado del río Trejo, siendo las más famosas la Calle Cuevas de la Sombra (donde están los bares) y Calle Cuevas del Sol. Ambas calles se integran perfectamente con la roca, mostrando un escenario muy particular.
Además de estas calles, Setenil tiene otros puntos de interés, como La Plaza de Andalucía o la calle calcetas. O las vistas desde el Torreón del homenaje, un antiguo castillo Nazarí (siglo XIII) que permite ver hasta la vecina Olvera.
Por cierto, un consejo si van en coche. El parking de Setenil de Las Bodegas es complicado para coches grandes. Estoy seguro de que bastante gente con coches de alquiler ha tenido problemas para meter o sacar el coche, así que no lo olvidéis.
Olvera, un castillo y una iglesia que nos observan
A unos 14 kilómetros de Setenil de Las Bodegas se encuentra Olvera. Encaramado en lo alto de un cerro, este pueblo es apreciable desde una buena distancia.
Olvera es de esos pueblos que tienen un poco de todo, para que el visitante no se aburra. Como introducción al pueblo mencionaría: la calle Llana, una calle señorial, la omnipresente Iglesia Parroquial Nuestra Señora de la Encarnación, y el castillo árabe que domina el pueblo y los campos de olivos de los alrededores.
Las calles de Olvera
Probablemente dos sean las calles más interesantes para visitar dentro de Olvera. Por un lado la Calle Llana, que nos acercará al centro del pueblo, mientras se puede apreciar el pasado señorial de sus casonas.
Por otro lado, la fotogénica Calle Calzada, que permite subir a la iglesia y al castillo árabe, ya en el área de la antigua medina.
El Castillo árabe de Olvera
Construido a finales del siglo XII, formó parte del sistema defensivo del reino nazarí de Granada. Este monumento se encrespa sobre una roca a 623 metros sobre el nivel del mar, vigilando todos los alrededores.
La visita es obligatoria, ya que se trata de un Bien de interés Cultural, y las vistas son magníficas. Agradará tanto a amantes de los castillos como de la fotografía. Con la entrada también se puede visitar el Edificio de La Cilla, un antiguo granero que alberga la oficina de turismo y un centro cultural.
Iglesia Parroquial Nuestra Señora de la Encarnación
Al lado del castillo esta robusta iglesia de estilo neoclásico llama la atención en kilómetros a la redonda. Al igual que el castillo, que se encuentra un poco más elevado, destaca por las vistas.
Santuario de Nuestra Señora de los Remedios
Para las personas devotas, este es un sitio importante dentro de la provincia de Cádiz. Conocido popularmente como la ermita de los Remedios, y ubicado a 2 kilómetros del municipio, es una construcción barroca, asentada sobre una antigua ermita.
Zahara de la Sierra, el vecino de Grazalema
El entorno de este pueblo no puede ser más idílico. A las orillas del embalse Zahara-El Gastor en el que la gente se baña, a las puertas de la Sierra de Grazalema, espacio verde declarado zona de la Biosfera por la Unesco, y a medio camino entre Ronda y el pueblo blanco de Grazalema (también muy recomendable).
La orografía accidentada donde se sitúa, hace que las calles sean empinadas, para poder solventar los desniveles.
Aunque se trata de un pueblo pequeño (apenas 1.400 habitantes), fue declarado Conjunto Histórico-Artístico.
Además de la iglesia mayor, destacan el antiguo poblado nazarí y los restos del castillo, al cual se puede subir y desde el cual se obtienen las mejores vistas del pueblo.
Arcos de La Frontera, población monumental
Terminando con la ruta por los pueblos blancos de Cádiz, os aconsejo una visita a Arcos de La Frontera, una población de tamaño considerable y con mucha historia.
Si atravesamos la calle Corredera cuesta arriba, podremos llegar a la ruta monumental de Arcos de La Frontera. Las calles de esta zona son preciosas, y hay que recorrerlas con tranquilidad.
La Plaza del Cabildo
La zona más monumental se encuentra en la Plaza del Cabildo, donde se concentran la mayor parte de edificios históricos. Allí están el Parador Nacional, el Castillo Ducal, y el Convento de las Mercedarias Descalzas, además de la anteriormente citada Basílica Menor y Parroquia Mayor de Santa María de la Asunción.
Las calles de Arcos de La Frontera
De todas las calles, yo me quedaría con el Callejón de las monjas, al lado de la emblemática Iglesia de Santa María. Los arbotantes de la iglesia le dan su particular ambiente. A pesar de su estrechez y ubicación, curiosamente esta calle es de las más transitadas por vehículos.
Los miradores al río Guadalete
Además de la Plaza del Cabildo, en uno de sus extremos se encuentra el Balcón de La Peña, un remanso de paz en donde poder disfrutar de las vistas de la zona. Además, puede que encuentres a un cetrero con diferentes aves, así que si quieres hacerte una foto con un águila Harris o un Búho real, esta es tu oportunidad.
Callejea por Arcos de La Frontera
Arcos de La Frontera tiene más alicientes para captar la atención del turista, por lo que te invito a que transites por sus calles y disfrutes de un bonito paseo, o del tapeo que tanto gusta en esta población.
Castellar de La Frontera – bonus track
No sé si está considerado un pueblo blanco, pero da igual. Este pueblo se ha ganado a pulso entrar en la lista de los pueblos más bonitos de la provincia de Cádiz.
Para llegar hasta Castellar, primero hay que ir hasta Castellar nuevo, en el campo de Gibraltar. Esta población no tiene mucho interés, pero una vez allí, se coge la carretera CA-P-5131 que nos llevará a Castellar viejo.
Este encantador pueblo medieval se encuentra encaramado sobre la cresta de una roca, vigilante, oteando el Estrecho de Gibraltar. Las vistas bien merecen la paciencia para llegar hasta aquí.
El Palacio de los Condes de Castellar es el edificio más importante, pero las pequeñas calles, adornadas con infinidad de flores, hacen de este lugar algo especial. Sin duda alguna, uno de los sitios imprescindibles en la zona.
Y otrs muchos más – bonus track 2
Vale, de acuerdo, esta entrada debería de haber acabado ya, pero es que la provincia de Cádiz está llena de pueblos blancos.
Para algunos de ellos, ya hice especiales, como puede ser el caso de Conil de La Frontera, Medina Sidonia o Alcalá de los Gazules. Te animo a que visites dichas entradas.